Tabaco
● EFECTOS
● DAÑOS
El tabaco es una planta originaria de América y fue llevada a Europa por los marinos españoles que descubrieron el nuevo mundo. El consumo del tabaco era habitual en las tribus indígenas y por lo general consumido con fines religiosos, pero también se le daba un uso medicinal.
El tabaco se fue generalizando por Europa y llevando a todos los continentes por los marineros. Con los años, pasó de ser una sustancia consumida en ambientes de bajos estatus sociales a ser considerada una sustancia propia de nobles con gustos exquisitos (con glamour) en las cortes europeas.
El tabaco pasó a ser un problema de salud pública con la aparición de la maquina para elaborar cigarros durante la Revolución Industrial, ya que con este adelanto se inició el consumo masivo.
Actualmente el tabaquismo es considerado un problema de Salud Pública por Instituciones de alto prestigio como lo es la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cual refiere que en el mundo mueren diariamente 14,000 personas por esta adicción, lo que representa un total de 5 millones de fallecimientos al año.
También refiere que la adicción al tabaco está en aumento, y los grupos más afectados son las mujeres y en especial los niños, ya que la edad promedio de inicio a la adicción ha bajado hasta los 13 años de edad.
La adicción al tabaco así como los daños que ocasiona en el organismo, son conocidos por la industria del tabaco desde hace muchos años, pero esta información se mantuvo en secreto hasta fechas recientes.
El tabaco es una planta de
la familia de las solanácea y se le conoce científicamente como
Nicotiana tabacum. Sus hojas se procesan para el consumo
humano, elaborándose con ellas cigarrillos, cigarros, puros, picadura de pipa,
rapé, tabaco de mascar, etc.
La forma más extendida de consumo de tabaco es el cigarrillo, en cuyo humo se
han identificado alrededor de 4,000 componentes tóxicos, de entre los cuales los
más importantes por la cantidad presente en la planta así como por su toxicidad
son los siguientes:
Nicotina: La nicotina es una sustancia estimulante
del Sistema Nervioso Central (SNC), responsable de los efectos psicoactivos de
la sustancia y de la intensa dependencia física que el tabaco provoca.
Alquitranes: Sustancias probadamente cancerígenas, como el benzopireno, que inhala el fumador y quienes conviven con él en ambientes cerrados ya que se ven forzados a respirar el humo tóxico.
Monóxido de carbono: Este gas se adhiere a la hemoglobina, dificultando la distribución de oxígeno a través de la sangre.
Irritantes: Estos son múltiples y responsables de la irritación del sistema respiratorio, provocando entre otras patologías faringitis, laringitis, bronquitis agudas y crónicas, enfisemas, EPOC, etc.
El tabaco es consumido en forma habitual como cigarros o cigarrillos, que son las más populares. Pero también se consume en puros o en pipa que son dos formas no muy generalizadas.
El consumo es a través de la inhalación de los gases que desprende la combustión del tabaco. Hay ciertos sectores de la sociedad que lo prefieren consumir masticado.
Como ya comentamos, el tabaco tiene efecto sobre el SNC principalmente que es el percibido al consumirlo, pero realmente el tabaco actúa en varios aparatos y sistemas del organismo.
Sus principales efectos:
Efectos psicológicos: Los efectos psicológicos principales de la intoxicación con tabaco son la sensación de mayor concentración, relajación y sensación de seguridad.
Efectos fisiológicos: Entre estos efectos los más importantes que provoca el consumo habitual de tabaco son la disminución de la capacidad pulmonar, fatiga prematura, atrofia de los sentidos del gusto y el olfato, envejecimiento prematuro de la piel de la cara, mal aliento, color amarillento de dedos y dientes, tos y expectoraciones, sobre todo matutinas.
El tabaquismo se considera en la actualidad como la peor epidemia del siglo veinte y del actual ya que es el responsable de la muerte de millones de personas alrededor del mundo y se ha convertido en un problema de salud pública en el cual los estados gastan infinidad de recursos para tratar los efectos secundarios que ocasiona (enfermedades).
Los daños que ocasiona el tabaquismo en el plano psicológico son la dependencia psicológica, reacciones de ansiedad y depresión consecuentes a la dificultad para dejar el tabaco.
En lo orgánico los daños son múltiples y entre estos encontramos faringitis y laringitis, dificultades respiratorias, tos y expectoraciones, úlcera gástrica, cáncer pulmonar, cáncer de boca, laringe, esófago, riñón y vejiga, bronquitis y enfisema pulmonar, cardiopatías (infartos de miocardio y anginas de pecho).